Ciudad de México.- El Gobierno de Tamaulipas, a través de la Procuraduría General de Justicia del Estado, cumplimentó una orden de aprehensión en contra de Eugenio Hernández Flores, ex gobernador de Tamaulipas, acusado de los delitos de peculado y lavado de dinero.
En un comunicado se detalla que el ex mandatario, a través de su prestanombres, Alberto Berlanga Bolado y la empresa GMC S.A de C.V, de Altamira, realizó en 2007 una operación de compra por 16 millones de pesos de un terreno de mil 600 hectáreas, localizadas en el Puerto Industrial de Altamira y que pertenecen en realidad al patrimonio del estado.
Las mil 600 hectáreas actualmente tiene un valor real de mil 584 millones de pesos.
Para la operación de compra-venta participaron las empresas; Materiales y Construcción Villa de Aguayo, propiedad de Fernando Cano Martínez, presunto prestanombres de Tomás Yarrington y GMC, S.A de C.V. de Altamira, propiedad de Alberto Berlanga Bolado, ex Secretario de Obras Públicas y Desarrollo Urbano en el gobierno de Eugenio Hernández Flores.
Excélsior
Ciudad de México.- Los Nodos Binacionales de Innovación (Nobi) del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), en colaboración con la National Science Foundation (NSF), tienen el objetivo de fortalecer diversos sectores de la innovación y el emprendimiento como la manufactura y la salud.
Esto a través del apoyo de emprendimientos de base tecnológica para su validación de mercado y descubrimiento de clientes potenciales, en particular en el Nodo de Innovación en Salud, que está en operación desde principios de 2017.
Para el líder del nodo, Fernando Moya Ávila, se trata de un importante impulso a la innovación en el sector. Explicó que las funciones de los cinco nodos tienen como principales virtudes fomentar una cultura del emprendimiento mucho más enfocada en el conocimiento del cliente para ofrecer soluciones específicas a través de la ciencia y tecnología.
“Hemos hecho un gran equipo entre las cuatro instituciones que participamos: el Instituto de Biotecnología (IBt) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM), la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM) y el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS)”, afirmó en entrevista con la Agencia Informativa Conacyt.
El investigador de la Escuela de Negocios del ITESM aseguró que estas metodologías para emprender son nuevas en todo el mundo y el Conacyt vio la oportunidad de traerlas y aplicarlas en México para colocarse a la vanguardia internacional.
"Una de las grandes ventajas de la integración de las diferentes instituciones es que todas tienen formas de pensar totalmente distintas, lo cual es benéfico para una mayor pluralidad y diversidad de proyectos. Nos une un propósito que es el desarrollo tecnológico del país por medio del emprendimiento y la innovación”, aseguró el doctor Moya Ávila.
En esta primera generación han participado más de 20 proyectos de los que se seleccionaron algunos y pasaron a la etapa de incubación, pues su idea ya fue validada. Fueron resultados muy alentadores ya que la investigación y desarrollo tecnológico en salud es muy cara y complicada debido a la carga regulatoria que conlleva, explicó el investigador.
“Tenemos que sacar a los científicos de sus laboratorios, llevarlos también al campo de la investigación de mercado e involucrarlos más para que sus desarrollos e inventos tengan un sentido en el mercado y que su venta sea factible”.
Entre todos los proyectos que surgieron a través de la iniciativa que conjuntó a las cuatro instituciones, existen desarrollos como vacunas contra la influenza mucho más baratas y hasta nuevas soluciones más rápidas a lesiones leves. “Son proyectos con un alto grado de complejidad que si se llevan hasta la instancia de mercado, son proyectos que los van a pelear en las industrias de la salud”, afirmó.
Manufactura avanzada
México comienza a destacar a nivel mundial en este sector, actualmente el principal exportador de Latinoamérica. En 2010, las exportaciones del sector manufacturero mexicano sumaron 243 mil 772 millones de dólares.
En ese sentido, los esfuerzos del Conacyt se han canalizado al Centro de Investigación y Desarrollo Tecnológico en Electroquímica (Cideteq), institución que lidera el Nodo Binacional de Manufactura Avanzada y Procesos.
En este nodo participan el Centro de Investigación en Materiales Avanzados (Cimav), el Centro de Tecnología Avanzada (Ciateq), el Centro de Innovación Aplicada en Tecnologías Competitivas (Ciatec), el Centro de Ingeniería y Desarrollo Industrial (Cidesi), el Centro de Investigación en Química Aplicada (CIQA), la Corporación Mexicana de Investigación en Materiales (Comimsa) y el Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (Cinvestav) del Instituto Politécnico Nacional (IPN).
El líder de este nodo, el doctor Julio Alcántar, del Cideteq, expresó que México tiene “una excelente oportunidad en el panorama global, pero falta más capacitación y desarrollo de tecnología mexicana. Tenemos que ver la innovación desde un punto de vista transformador. Asimismo, lograr que los desarrollos tecnológicos tengan un fuerte componente de sustentabilidad”.
En el Nodo Binacional de Manufactura Avanzada y Procesos, capacitan y asesoran los proyectos que fueron beneficiados en la primera generación para que involucren en sus procesos de desarrollo aspectos como el ciclo de vida y la sustentabilidad.
Explicó que esta es una semilla que se ha plantado de manera estratégica y jugará un papel fundamental para el desarrollo del sector de la manufactura. “Tenemos que impulsar un desarrollo nacional de tecnologías que se pueda apoyar de las mejores prácticas” .
Para Julio Alcántar, otro factor que se debe reconocer es que los centros tienen capacidades y soluciones listas para insertarse en la vida productiva del país de la mano con las diferentes industrias.
"Nueve de los proyectos ya han sido aprobados para una fase de incubación, por lo que tienen el potencial de volverse empresas de base tecnológica que contribuyan a la formación de una sociedad basada en el conocimiento", concluyó el doctor Julio Alcántar.
Norte y Bajío
La región Norte del país ha sido un fuerte impulsor de la innovación en México, por ello se desarrolló un nodo que agrupa algunas de las instituciones más importantes del sector de la innovación en el norte del país.
Para el director ejecutivo de la Fundación México-Estados Unidos para la Ciencia (Fumec), Guillermo Fernández de la Garza, la región tiene todos los elementos para generar tecnología de gran impacto. “Los científicos deben de sentirse muy orgullosos de estar generando oportunidades a través de la consolidación de empresas de gran impacto para el país”.
nodos rec1 10517Expresó que las academias deben reconocer a los investigadores que hagan empresas que generen grandes resultados en el mercado porque es lo que impulsará el crecimiento económico y la generación de resultados.
“Estamos en el camino para que se entienda que el conocimiento es la base del desarrollo y necesitamos más formas para integrarlo. Esta es una, el fortalecimiento de capacidades del personal científico”.
Para Fernández de la Garza, saber cómo estructurar una empresa y potencializarla también es un reto intelectual para los investigadores que, al final, tiene satisfactores como cualquier otro.
En el Nobi están generando las bases para que las redes de integración entre profesionales sean más naturales, estableciendo diferentes procesos de comunicación para aprovechar las capacidades de sus pares.
Los socios de este nodo son: Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL), Centro de Investigación y Asistencia en Tecnología y Diseño del Estado de Jalisco (Ciatej), Centro de Investigación en Química Aplicada, Centro de Vinculación Tecnológica de Caintra-CCM (CVT) y el Centro Global de Innovación y Emprendimiento de la Universidad de Texas en Austin (CGIE).
Este Nodo Binacional de Innovación del Bajío conforma a 24 equipos pertenecientes a las siete instituciones que integran Nobi Bajío; del 31 de julio y hasta el 2 de agosto se efectuó el inicio de la primera etapa con sede en la ciudad de Irapuato.
Nobi Bajío está conformado por siete instituciones y universidades de los estados de Guanajuato, Michoacán y Jalisco, estos son: la Unidad Irapuato del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados del Instituto Politécnico Nacional (Cinvestav Irapuato), el Centro de Investigación y Asistencia en Tecnología y Diseño del Estado de Jalisco, el Centro de Investigación en Matemáticas (Cimat Guanajuato), el Instituto Tecnológico Superior de Irapuato (ITESI), el Instituto Tecnológico de la Piedad (ITLP), la Escuela Nacional de Estudios Superiores, unidad León de la UNAM (ENES UNAM) y el ITESO, Universidad Jesuita de Guadalajara.
El Centro de Investigación en Matemáticas colabora en tres de los proyectos del Nobi. Para la maestra Ivete Sánchez Bravo, gerente de Desarrollo de Software del Cimat, cada vez es más evidente la necesidad de trabajar en equipos multidisciplinarios para resolver problemas, y mejor si se da en el marco del modelo de las tres hélices: gobierno, empresa y academia.
“Para el Cimat, participar en el Nobi es una oportunidad para fijar políticas internas de las instituciones, desarrollar el potencial del capital humano y definir prácticas de participación en el mercado”.
Se pretende que las instituciones participantes sean líderes regitonales en el desarrollo de herramientas y recursos que impulsen la innovación y el emprendimiento de base tecnológica, con particular énfasis en la formación de capacidades del personal científico en temas de innovación tecnológica.
Según el Índice de Innovación Global de la Universidad de Cornell y la Oficina Mundial de Propiedad Intelectual (OMPI), la innovación requiere de las políticas correctas para ser activamente impulsada y sostenida.
Conacyt
Ciudad de México.- La robótica se ha vuelto parte importante de nuestras actividades cotidianas. Está presente desde juguetes para niños, hasta en procesos industriales que permiten optimizar tiempo y recursos en la elaboración de productos.
La construcción de un robot podría sonar como una labor complicada que solo un ingeniero podría llevar a cabo, pero ¿sabías que estudiantes desde nivel primaria pueden construir robots? Enseñar a niños y niñas sobre electrónica, mecánica y robótica es uno de los objetivos de Electrónica Junior, un proyecto que acerca la robótica al público infantil.
Rafael Morales Orozco, director de este proyecto, relata en entrevista con la Agencia Informativa Conacyt que la idea nació el verano del año pasado, pues no tenía un lugar en dónde inscribir a sus hijos para que tomaran un taller de verano. Viendo su necesidad y la falta de talleres de este tipo, aprovechó la oportunidad y buscó la forma de presentar un curso de robótica orientado a estudiantes de nivel básico.
“Somos una editorial llamada Electrónica y Servicio, hacemos material para capacitación en electrónica, mecánica y electrónica automotriz. Tenemos laboratorios que son la base con lo que damos los talleres. Tenemos un manual con 25 prácticas que incluye todos los componentes electrónicos”, comentó Morales Orozco.
El taller fue presentado originalmente en una sola escuela y, viendo la aceptación del mismo, se decidió por ofrecerlo a otras escuelas como taller extracurricular para el ciclo escolar 2016-2017. Desde septiembre del año pasado hasta julio de 2017, se logró capacitar a 450 alumnos en 18 sedes, entre las que además de escuelas se encuentran casas de cultura y librerías y la Central de Abastos de Ecatepec, Estado de México.
Con el inicio del ciclo escolar 2017-2018, el taller se expandió a nivel medio superior, llegando a sumar 29 sedes en las cuales se ofertan los talleres de robótica I y II. Morales Orozco expresó que el taller puede convertirse en una plataforma de varios años, pues se tiene en cuenta la posibilidad de desarrollar el tercer nivel del taller de robótica, así como cursos afines, como física, videojuegos y otros temas de tecnología.
En los cursos participan estudiantes de diversas edades que cursan desde el primer año de primaria hasta la preparatoria. Primero se les enseñan conceptos básicos de electrónica con el fin de que sepan cuál es la función de los componentes de un robot. Algo que hace muy atractivo el curso es que desde la primera lección pueden realizar experimentos que les permiten reforzar el conocimiento teórico.
Entre los robots que aprenden a construir los alumnos, se encuentran carros seguidores de líneas, seguidores de luz, carros controlados vía Bluetooth con un teléfono inteligente y vehículos con sensores ultrasónicos que sortean obstáculos.
Morales Orozco menciona que además de enseñar robótica a los niños se han implementado otras estrategias. “Les enseñamos sobre emprendimiento, desarrollo de habilidades sociales y desarrollo de liderazgo”.
Asimismo, Morales Orozco menciona que los cursos de robótica responden a la demanda de los padres por hallar la forma de que sus hijos no solo utilicen las tabletas electrónicas y teléfonos inteligentes para jugar sino que utilicen esos aparatos para investigar, estudiar y crear cosas nuevas.
El pasado junio se realizó un concurso intercolegial en el que participaron 100 niños en cinco categorías: Innovación de proyectos, en el cual se debía mejorar alguna de las 25 prácticas del manual; Inventos, en donde los alumnos usaron su imaginación para crear algo totalmente nuevo; Vehículos seguidores de líneas; Vehículos con sensores ultrasónicos, en el cual el carro debía salir de un laberinto; y, por último, el Desafío contra reloj, donde el reto fue armar una práctica en menos de 10 minutos.
Conacyt
Buscador
Directorio
Directora General:
Lic. Rocío Rivera Méndez
Asesora Jurídica:
Mtra. Monserrat Minerva Cobos
Fotografía:
Webmaster:
Para contactarnos:
redaccion@veracruzinforma.com.mx o al cel 2291-275227