Hugo Valencia Juliao/ Agencia Informativa Conacyt/ Ciudad de México.- La regeneración de tejidos a través de biomoléculas es una nueva aplicación de la nanobiotecnología que puede ayudar a la recuperación total de pacientes que han sufrido quemaduras graves u otro tipo de lesiones en la piel.
Este tipo de biopelículas para la regeneración epitelial están hechas a base de extractos de algunas plantas y otros productos, en este caso del quitosán, subproducto de la industria pesquera, y pululano producido por el hongo Aureobasidium pollulans, así como la implementación de nanopartículas.
Las moléculas de origen vegetal se introducen en una biopelícula que mediante su aplicación intrahospitalaria servirá para la regeneración de la piel, además de impedir la proliferación de hongos y bacterias, la cual es una causa común de complicación en pacientes con quemaduras, dijo la doctora Leticia Buendía González, profesora investigadora de tiempo completo en la Facultad de Ciencias de la Universidad Autónoma del Estado de México (Uaemex).
En esta investigación los especialistas de la Uaemex están colaborando con la industria. El proyecto cuenta con el apoyo del Programa de Estímulos a la Innovación (PEI) del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt).
“En un principio la investigación surgió en la industria quienes detectaron que era un área de oportunidad en el tratamiento que siguen los médicos en los pacientes con quemaduras severas, pues éstos son propensos a las infecciones que pueden ser de consecuencias fatales”, explicó la investigadora quién es coordinadora de Extensión y Vinculación Universitaria de la Facultad de Ciencias de la Uaemex.
Además, en los tratamientos tradicionales con gasas y curaciones se pierde la piel que está sana, en consecuencia se alarga la recuperación y regeneración de los tejidos. “Como la biopelícula que se está generando es biodegradable y adherente, los principios activos se van incorporando a fin de lograr la regeneración epitelial”.
Este desarrollo tecnológico se encuentra en su primera fase, se están generando los bioactivos a partir de sistemas de cultivo controlados. “El cultivo in vitro nos ayuda a obtener una gran cantidad de biomasa pero con una producción homogénea de los compuestos, esto es fundamental para lograr la calidad deseada”, comentó en entrevista con la Agencia Informativa Conacyt.
En paralelo, también están realizando las pruebas in vitro para comprobar los efectos de regeneración epitelial y antimicrobiana, en las próximas fases del proyecto de investigación se harán los estudios preclínicos y clínicos.
“En México tenemos numerosos recursos naturales que se pueden y deben aprovechar para mejorar la calidad de vida de la sociedad, pero fundamentado con la investigación y el desarrollo tecnológico, ya que pueden servir para aplicaciones que no hubiésemos imaginado”, dijo Buendía González.
Vinculación con la industria
Recientemente en el país existe un auge de colaboración entre la industria y la academia para generación de productos innovadores que tengan un futuro en el mercado.
Sin embargo, la titular de la Coordinación de Extensión y Vinculación Universitaria de la Facultad de Ciencias, reconoció que el camino es largo todavía pues se deben generar más mecanismos de interacción y comunicación que logren resolver las áreas de oportunidad que existen en la sociedad.
“Este tipo de proyectos de investigación además de resolver una necesidad específica fortalecen las capacidades de las instituciones dotándose mutuamente de infraestructura y aplicación del conocimiento que existe gracias a las colaboraciones”, concluyó.