Veracruz, Ver. - La Delegación Regional del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Veracruz Norte, recomienda a los padres de familia a prestar atención a las señales de alerta que puedan presentar sus hijos, debido al consumo de lácteos, y que en caso de manifestarse acudan a la Unidad de Medicina Familiar (UMF) que corresponda para iniciar un tratamiento ante una posible intolerancia a la lactosa o de una alergia a la proteína de la leche de vaca.
En este sentido, la doctora Alicia Santa Cortés González, médico Pediatra del Hospital General de Zona (HGZ) N° 11, explica que la intolerancia a la lactosa es una incapacidad que tiene el intestino delgado para digerir y transformar la lactosa en glucosa y galactosa por un déficit de la enzima lactasa, en cambio, la alergia a la proteína de la leche de vaca, es una reacción de hipersensibilidad iniciada por un mecanismo inmunitario específico contra la proteína de la leche de vaca, es decir que son padecimientos totalmente diferentes.
Los síntomas en ambos casos son similares, distención abdominal, gases, cuadros de diarreicos, heces fétidas, malestares, entre otras cosas, la diferencia consistirá en la reacción que se observe ante la disminución en la ingesta de lácteos; posteriormente, a los seis meses se recomienda hacer una prueba de tolerancia a la lactosa, en virtud de que por lo regular los bebés generan una intolerancia transitoria que se espera se remita durante el primer año.
Para el caso de los menores que continúen lactando y presenten alguna reacción, se recomienda que la madre suspenda el consumo de todo tipo de lácteos, y complemente su alimentación con suplementos que aporten el calcio que el menor requiere para su sano desarrollo.
Por último, la especialista dijo que la leche sin lactosa no evita malestares que genera el consumo de lácteos, debido a que es leche a la que se les quita la lactosa, pero sigue conservando íntegras sus proteínas; de igual forma señalar que a pesar de los múltiples beneficios que se le atribuyen a la leche de soya, ésta no está indicada como primera opción para los niños, debido a que contiene micro proteínas que podrían generar distintas alergias.