Veracruz, Ver.- La emoción de ira es un término que se refiere a la furia y violencia, se trata de una conjunción de sentimientos negativos que genera enojo e indignación, la psiquiatra del Hospital General de Zona (HGZ) Nº 71 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Veracruz Norte, Julissa del Rosario Ibáñez Ruelas, destacó la importancia de expresar de forma adecuada y constructiva la ira sin reprimirla ni controlarla, a fin de prevenir problemas en la salud física y emocional.
La especialista añadió que la ira es una descarga energética negativa, la cual surge muchas veces de forma inconsciente y siempre a raíz de la acumulación de molestias no expresadas o liberadas en su momento. “Toda persona es reactiva y por lo tanto es normal que surjan molestia ante situaciones que le desagradan, lo más saludable entonces, es no reprimir ese sentimiento”, señaló Ibáñez Ruelas.
Precisó que cuando existe ira dirigida hacia una situación o persona, el individuo debe plantearse por qué le produce tanto enojo y malestar debido a que quizá tenga que ver con alguna vivencia de su pasado, en donde se sintió agredido.
Además, la ira puede asociarse también a un exceso de actividad cerebral eléctrica sobre todo en la zona frontal provocando pérdida en el control de los impulsos, o a un incremento descompensado del neurotransmisor en el cerebro conocido como serotonina, que también genera mayor impulsividad.
Destacó que la ira puede ser explosiva (hacia otras personas o situaciones fuera de uno mismo), o implosiva (dirigida hacia la propia persona). Cuando es interna la persona puede caer en conductas autodestructivas, como lesionarse físicamente, comer de más o dejar de comer, o hacerse daño de alguna u otra forma.
“La terapia individual tiene como objetivo lograr que la persona se conozca y descubra lo que le enoja o lastima, se recomienda realizar actividades para descargar la energía de forma adecuada, los deportes son bastante útiles para canalizar energía pero eso no exime de que se requiera de una terapia profesional”, manifestó la psiquiatra Julissa del Rosario Ibáñez Ruelas.