Vivir con estrés, estar sometido a presiones familiares, laborales y problemas de pareja son factores que aumentan la posibilidad de fumar y con ello crear la adicción al tabaco, informó Arturo Navarrete Sánchez, Médico de la Coordinación de Prevención y Atención a la Salud del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Veracruz Norte.
Explicó que las personas consideran que este hábito los hace olvidar los trastornos emocionales. Dijo que fumar aumenta el riesgo de desarrollar cáncer de colón, gástrico, garganta, mama, riñón y vejiga, tanto en hombres como en mujeres.
Otra de las complicaciones que genera esta adicción es la irritación de ojos o garganta, enfermedades en vías respiratorias, bronquitis, sinusitis, gastritis, ulcera, cirrosis hepática; aumenta los niveles de colesterol y triglicéridos, subrayó Navarrete Sánchez.
También incrementa la probabilidad de padecer problemas cardiacos como hipertensión arterial, infartos al miocardio, angina de pecho y accidentes cardiovasculares, advirtió el médico.
Expresó que la edad en la que se empieza a fumar es aproximadamente a los 12 años, y se inicia principalmente por curiosidad. Destacó que debido a que las personas están sometidas a niveles altos de ansiedad, la mente asocia la adicción al cigarro con circunstancias emocionales positivas para mejorar sus actos, volviéndose parte de la cotidianidad.
Externó que el Seguro Social atiende a trabajadores y derechohabientes que desean dejar de fumar, por lo que los invitó a acudir a su Unidad de Medicina Familiar (UMF) para ser atendidos mediante el programa dirigido a fumadores y fumadoras.