Veracruz, Ver., a 03 de septiembre de 2017. Con tan solo tres días de vida y en una situación crítica ingresó Eytan Matías al Hospital General de Zona HGZ N° 71 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y debido a su grave padecimiento, fue trasladado a la Unidad Médica de Alta Especialidad (UMAE) del Centro Médico Nacional “Adolfo Ruiz Cortines”.
El menor se valoró de inmediato y fue diagnosticado con una malformación cardiaca congénita llamada “Trasposición de Grandes Arterias”; esto significa que la arteria aorta que debe nacer del ventrículo izquierdo, se originaba del ventrículo derecho y la pulmonar tenía su origen en el ventrículo izquierdo cuando lo normal es el ventrículo derecho, explicó la jefa del Servicio de Cardiología, Yoloxochitl García Jiménez.
Eytan Matías, se apreciaba azulado (cianótico) por la falta de la circulación de oxígeno en su cuerpo; es decir la sangre oxigenada que en una situación normal recorre los órganos, en su caso no circulaba a través de su cuerpo, sino que iba de nuevo a los pulmones; asimismo la sangre que necesitaba ser oxigenada, recorría una vez más el cuerpo sin pasar por los pulmones.
Una vez definido su padecimiento, fue canalizado a la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) y se le realizó cateterismo cardíaco diagnóstico y terapéutico para permitirle al menor que un poco de esa sangre oxigenada recorriera su cuerpo; acción que le permitía llegar en una mejor situación a la cirugía, que requería.
En su oportunidad, la señora Esperanza de 38 años de edad, madre de Eytan Matías, dedicada a las labores del hogar, comentó que en todo momento estuvo al tanto de la situación de su hijo; que siempre le reportaron muy grave, con muy pocas posibilidades de sobrevivir y un latente riesgo de muerte súbita, pero aun así ella se mantuvo con esperanza.
A sus escasos 14 días de vida, Eytan Matías fue ingresado a quirófano, donde se le vigiló de manera invasiva; es decir se colocaron líneas arteriales y catéter central, para mantener su estado general en las mejores condiciones y con buenos signos vitales; la cirugía duró aproximadamente seis horas, comentó la anestesióloga cardiovascular, Martha Alejandra Landero Jácome.
En dicho procedimiento se conectó la aorta en el origen donde se encontraba la arteria pulmonar (de lado izquierdo), ahí mismo se conectaron las arterias coronarias; también la arteria pulmonar se implantó en el lado derecho, donde realmente debió estar; durante la cirugía no se presentó ninguna complicación narró el doctor Héctor Alejandro Medina Gomez, cirujano cardiopediatra quien encabezó la cirugía del pequeño Eytan Matías.
Posteriormente, el pequeño paciente regresó a la UCI, donde permaneció con el tórax abierto (esternón), pues por la inflamación, el cierre del tórax podría provocar arritmias; sin embargo, gracias a la buena evolución del pequeño Eytan, a los cuatro días de la primera intervención, se le pudo realizar la segunda para cerrar el esternón, mencionó el jefe de cirugía cardiovascular y torácica, Alfredo Fidel Ramírez Vargas.
Este pequeño paciente logró evolucionar positivamente; se le retiraron los medicamentos de manera paulatina, hasta lograr su adaptación, hasta que quedó con lo mínimo necesario de fármacos; se le reinició la alimentación vía oral de este modo a su egreso de la UCI, salió comiendo, respirando solo y hemodinámicamente estable, expresó la pediatra encargada del servicio de la terapia, Clara Lilia Rodríguez Islas.
Asimismo, la jefa de pediatría y de terapia intensiva pediátrica, Yadira Hernández Torales, mencionó que pequeño estuvo apoyado con ventilación mecánica 14 días y que durante el proceso se vieron comprometidos los riñones por la falta de oxigenación; pero que gracias a la cirugía que le realizaron, estos órganos lograron recuperarse, retomar su función normal y su egreso fue satisfactorio.
Cabe destacar, que el doctor Héctor Alejandro Medina Gomez, recientemente se había capacitado en “Cardiopatías Congénitas Pediátricas”, razón por la cual no fue necesario trasladar al pequeño paciente al Centro Médico Nacional Siglo XXI, lo que hubiera representado un riesgo extra para su salud, debido al largo viaje.
La señora Esperanza, enfatizó en mencionar que se siente sumamente agradecida por la atención del doctor Medina y de igual modo, tanto con los jefes de área, como médicos y enfermeras del quinto piso y en especial a las de la Unidad de Cuidados Intensivos, donde su bebé, estuvo alrededor de 21 días.
En este mismo sentido, dio las gracias a los anestesiólogos y demás participantes en la cirugía del pequeño Eytan Matías; dijo sentir que los trataron en familia, que siempre tuvo el apoyo moral de parte de todos los miembros de la UMAE, pues el padre de su bebé, empleado de la empresa CICE, no podía permanecer todo el tiempo a su lado, debido a la rotación de horarios de su trabajo.
Hoy la señora Esperanza se encuentra en casa disfrutando de su pequeño hijo Eytan Matías, en compañía de su primogénito de 9 años y su pareja.