Al Estilo Mathey
Gustavo Cadena Mathey
Recordar a Don Jorge Manrique
Buen día apreciado lector:
No tanto por los pasados días de difuntos y a lo mejor sí, pero, hay ocasiones en que solitos llegan a la mente pensamientos de tiempos muertos que se vuelven vivos como cuando en la Enseñanza Media conocimos aquellas famosas Coplas de Don Jorge Manrique, a la muerte de su padre y las aprendimos de memoria:
“Recuerde el alma dormida avive el seso y despierte contemplando cómo se pasa la vida, cómo se viene la muerte, tan callando. Cuán presto se va el placer, cómo después de acordado da dolor, cómo a nuestro parecer cualquiera tiempo pasado fue mejor...”.
Pero bueno, no que “cualquier tiempo pasado fue mejor”, pero en serio, lo reitero, cuando se vive en una situación tan confundida y complicada como la nuestra, sobre todo en estos días, no es posible simplemente hacerse el indiferente y dejar que todo siga como está para que se continúe agravando.
Vaya, uno como observador social se cansa de emitir opiniones con el propósito de ofrecer, de hacer sugerencias para corregir o mejorar determinadas conductas y acciones públicas y a nadie le importa, como si no les interesara su responsabilidad social o ni cuenta se dieran.
Hace tres años el prestigioso periodista Arturo Reyes Isidoro hoy Premio Nacional de Periodismo hacía una aguda observación sobre el índice en la popularidad del hijo del Maestro Atanasio García apenas en el inesperado debut como gobernante; a pocos le importó y ahora cuando el mismo titular del Ejecutivo suelta la versión de que acaso por estos días se vaya a otras tareas, ya nadie se espanta y menos analiza niveles de aceptación.
Por esos días escribía este reportero que, si las cosas no le funcionaban al gobernador, buscara componer la situación y por lo menos contratara un buen auxiliar de relaciones públicas. Todavía tiene oportunidad, pero ya vimos es otra la mentalidad, absolutamente indiferente, valemadrista, para decirlo en forma popular.
Con el cambio se fueron los corruptos, pero también las buenas costumbres, las buenas maneras y la cortesía en política.
A propósito, el miércoles como a las 20 horas, al reportero se le ocurrió llamar al 911: “¿cuál es su urgencia?”, se oyó al teléfono; oiga aquí en el crucero de la avenida Xalapa con la Orizaba, por el monumento al gobernador Hernández Ochoa no funcionan los semáforos, es la locura, no hay agentes de Tránsito y puede haber accidentes....
“Me dice su nombre; su apellido; en qué colonia es?, me dice su edad?”; ¿qué qué?, ahí muere, y cuelgo, por eso estamos como estamos.
Tenga paz y armonía en su hogar; siembre plantas, cuide el agua.
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