Hora cero
Un oficio peligroso
Luis Alberto Romero
Después de 9 años de los hechos, la Fiscalía General de la República capturó al presunto homicida del periodista veracruzano Gregorio Jiménez de la Cruz.
El reportero, que cubría la fuente policiaca para periódicos como Notisur y Liberal del Sur, fue sacado de su domicilio, en Villa Allende, Coatzacoalcos, secuestrado, asesinado y abandonado en una usa fosa clandestina, en febrero de 2014, durante el gobierno de Javier Duarte.
El día 5 de febrero de dicho año se reportó su desaparición; cinco días después, el cuerpo fue hallado en Las Choapas, sur de Veracruz.
El hecho escaló por la demanda de justicia que plantearon inicialmente familiares, amigos y compañeros del gremio; y que hicieron suya organizaciones de defensa de los periodistas, como Artículo 19, entre otras.
Recordemos que durante ese sexenio, 2010-2016, los casos de ataques, agresiones y asesinatos contra periodistas veracruzanos fueron constantes.
Es una larga cadena de víctimas.
Antes del homicidio de Gregorio Jiménez de la Cruz hubo una cantidad impresionante de asesinatos de periodistas en Veracruz: Noel López Olguín, por ejemplo, fue torturado y asesinado también en el sur del estado, en marzo de 2011; y lo mismo ocurrió con Miguel Ángel López Velasco y Misael López Solana, del diario Notiver, victimados en junio de 2011.
Un mes después, en julio de ese mismo año, fue asesinada Yolanda Ordaz, reportera que cubría la policiaca para el diario Notiver, del puerto.
En abril de 2012, en uno de los casos más escandalosos, dramáticos, fue victimada la periodista Regina Martínez, quien había trabajado para la revista Proceso y para el diario La Jornada.
Ese mismo año, pero en mayo, fueron localizados los cuerpos de tres periodistas más en el puerto: Guillermo Luna Varela, Gabriel Huge Córdoba y Esteban Rodríguez.
En junio de 2012, un año particularmente violento para la prensa, fue asesinado Víctor Manuel Báez Chino, del periódico Milenio-El Portal y de la agencia de noticias "Reporteros policiacos"; y dos años después, en febrero de 2014, lo mismo ocurrió con Gregorio Jiménez.
Sólo durante el gobierno estatal de Javier Duarte, en Veracruz se cometieron 18 asesinatos contra periodistas veracruzanos; la lista incluye a Moisés Sánchez Cerezo, Armando Saldaña, Juan Mendoza, Anabel Flores, Manuel Torres y Pedro Tamayo.
Eso sin contar las desapariciones de Evaristo Ortega, Gabriel Fonseca, Cecilio Rodríguez, Miguel Morales, Sergio Landa, Anwar Israel Castillo, Ricardo Villanueva y Raúl Alfonso Rivera.
De acuerdo con la organización no gubernamental Artículo 19, en la entidad veracruzana se han acumulado en poco más de dos décadas, 33 asesinatos contra periodistas, incluyendo los 18 del periodo de Duarte y los 7 registrados de 2018 a la fecha.
De forma reciente, la Comisión Estatal para la Atención y Protección de los Periodistas, dio a conocer que durante 2022 se reportaron más de 100 agresiones contra periodistas veracruzanos.
Lamentablemente, en la mayoría de los casos –no en todos– de los trabajadores de la prensa, periodistas y reporteros asesinados en Veracruz, ha prevalecido la impunidad.
Con la captura, por parte de la FGR, de uno de los presuntos autores del homicidio de Gregorio Jiménez se responde a una demanda que lleva casi una década.
@luisromero85