Prosa aprisa
¡En vida hermano, en vida!
Arturo Reyes Isidoro
El 20 de enero de 2020, con el encabezado: “Carlos Brito, una vida en la vida política de Veracruz”, publiqué el siguiente texto:
“El maestro Carlos Brito Gómez se prepara para celebrar sus 86 años de edad el próximo 21 de febrero, dentro de un mes.
Ingresó a los 19 años al PRI cuando el dirigente nacional era el general sinaloense Gabriel Leyva Velázquez.
Oriundo de Tonalá, municipio de Coatzacoalcos, en el extremo sur del Estado, que hace frontera con Tabasco, cursó su licenciatura en Derecho en la UNAM.
Ahí tuvo como compañeros a quienes después destacaron en la vida política de México (Manuel Bartlett uno de ellos, también sobreviviente) y por quienes se incorporó al equipo de campaña del entonces candidato al gobierno del Estado, Rafael Hernández Ochoa (RHO).
Ahí se ganó la Subsecretaría de Gobierno, que entonces era más poderosa que la Secretaría de Gobierno. No conocía ni había tratado a RHO, hasta la campaña, pero tuvieron tal entendimiento que hicieron uno de los mejores gobiernos en la historia de Veracruz.
Ese gobierno fue un semillero de jóvenes políticos que llegaron a destacar hasta alcanzar la gubernatura, como Fidel Herrera Beltrán, Miguel Ángel Yunes Linares y Flavino Ríos Alvarado.
Brito fue alcalde de Coatzacoalcos, diputado local y federal, presidente de la Mesa Directiva del Congreso veracruzano, dirigente estatal del PRI y delegado de ese partido en Chiapas, Tlaxcala, Tamaulipas, Guerrero y Zacatecas, y de la CNOP en Baja California.
A sus 85 años y a 66 de su militancia en las filas tricolores se mantiene activo en la vida de su partido: preside la Comisión Estatal de Procesos Internos.
En su larga trayectoria ha forjado a muchos jóvenes que después han sido protagonistas de la vida política de Veracruz: alcaldes, diputados, senadores, gobernadores, funcionarios públicos, dirigentes de su partido, muchos de los cuales, la mayoría, se han olvidado de él.
El sábado pasado desayuné con él. Nos acompañó su hija Noemí, de gratísima presencia. Platicar con él es abrevar mucho en la historia política de Veracruz. Mesurado, como siempre ha sido, sin ningún alarde de ostentación, la plática brincó de un tema, de un repaso, de un recuerdo a otro. Me sorprende su memoria. Por ejemplo, se acuerda muy bien que en la campaña de Hernández Ochoa, en 1974, iba yo como reportero (fue la primera que cubrí de candidato a gobernador) del Diario de Xalapa (como alumno de Froylán Flores Cancela).
Recordamos de aquel año a Guillermo Zúñiga Martínez, a quien consideraba su hermano, y no faltó el nombre de Pepe Yunes y de otros actores políticos de la actualidad, de su partido y de otros partidos.
Pero no solo comenta. Pregunta también, incluyendo nombres del medio periodístico y de los posibles nuevos partidos. Habla de la rifa del avión, de la situación política en Coatzacoalcos y en Xalapa. Se advierte que se mantiene al día. Lee dos, tres medios impresos porque se los envían a su casa.
Me da su pronóstico de lo que le espera a su partido en la elección de 2021. Disfruta, ya repuesto de una conjuntivitis y de una molestia en la garganta que lo afectó a inicio de año, de dos vasos de jugo de zanahoria, de una ración de frijoles refritos, de dos minipicadas con un par de huevos estrellados y de una ración de tocino.
En La Estancia de los Tecajetes se ve que lo quieren bien. No pasa ni un minuto cuando cada vez le cambian las tortillas hechas a mano, recién salidas del comal. Se las ponen en la mesa con palabras de mucho respeto y consideración, se diría que lo chiquean, pues. Al medio día del sábado afuera llueve cuando nos despedimos. Brito, como todo mundo lo conoce, es, qué duda cabe, una historia viviente de Veracruz”.
La última vez que lo saludé fue el 20 de diciembre pasado en una comida, en el rancho de Pepe Yunes. Lo vi cansado. Ha enfrentado problemas de salud, pero se ha logrado recuperar.
Este viernes al medio día su partido le hará un merecido y justo reconocimiento en la sede del CDE, que encabezarán los dirigentes nacional y estatal, Alejandro “Alito” Moreno y Marlon Ramírez Marín, respectivamente.
Es muy buen detalle de Marlon. Habla bien de él. Brito es un emblema, una institución del PRI. Qué bien que lo homenajean en vida, como debe ser.
“Hay apellidos que generan rasquiña”: Manuel a Chío, por su reunión con Javier
A pregunta de reporteros sobre la fotografía que circuló en las redes de una reunión de Rocío Nahle con los dirigentes del partido Verde, en especial con Javier Herrera, Manuel Huerta declaró ayer en Boca del Río que si bien la libertad de reunión es un derecho, los servidores públicos tienen la obligación de informar sobre sus motivos para tales encuentros.
Expresó que por su parte hay respeto hacia los militantes de todos los partidos, “pero hay apellidos que generan rasquiña recordar” (lo que muchos interpretaron como una alusión indirecta al exgobernador Fidel Herrera Beltrán, porque aunque no lo mencionó por su nombre, dijo “como el que acaba de cumplir años”).
En lo que se entendió como un tono irónico, insistió en que la Secretaria de Energía habrá de manifestar el motivo de dicha reunión, “estoy seguro que si se lo preguntan podrá explicar muy bien alguna razón institucional para haberlo hecho”.
La cena de anoche, sobre temas de inversiones e inseguridad
Tal y como circuló en las redes sociales y en algunos medios, anoche tuvo lugar una cena en Orizaba entre empresarios de esa ciudad, de Córdoba e Ixtaczoquitlán con el dirigente nacional del PRI Alejandro “Alito” Moreno.
Pero a los hombres de negocios, si bien les gusta la grilla también, por ahora su prioridad son los temas de inseguridad y de la falta de inversiones en el estado, y en eso se enfocaron anoche, nada de destape del alcalde Juan Manuel Diez Francos, como manejaron algunos.
La reunión la pactó el dirigente estatal y diputado local Marlon Ramírez Marín con el empresario Othón Porres, quien lo visitó el martes pasado en el Congreso para expresarle la preocupación sobre problemas que viven y enfrentan, ante lo que Marlon les ofreció reunirlos con “Alito” aprovechando que visitaría el estado.
No es la primera reunión de ese tipo que han tenido los hombres de las tarjetas de crédito oro con personajes políticos, incluyendo de Morena, pues antes se reunieron con Sergio Gutiérrez Luna y Rocío Nahle.