Prosa aprisa
Censura a la prensa, tipo AMLO, llega ahora al palacio de gobierno
Arturo Reyes Isidoro
Cuando escribo estas líneas llovizna en Xalapa, al menos en el área en la que estoy redactando; poco después del mediodía se nubló y al empezar la tarde se empezaron a sentir las primeras gotas.
Es pues una tarde gris, húmeda, y a seis días de que inicie la primavera, en la capital de Veracruz, peculiar por su clima (es fama que se presentan las cuatro estaciones en un mismo día), empezó a caer la noche temprano (cuando he terminado de escribir llueve muy fuerte y escucho en la lámina el golpeteo del granizo).
Soy ya un viejo periodista (el 10 de mayo cumpliré 53 años en el apasionante –y riesgoso– oficio) y un periodista ya viejo (a muchos adultos mayores no les gusta que a mi edad, 73 años, así me considere y lo diga, porque tienen más años que yo), que ha sido testigo y actor de la vida pública de Veracruz desde inicio de los años setenta.
A veces me pregunto si lo que estamos viviendo ahora me preocupa porque es producto de mi imaginación, o de mi estado de ánimo, o de alguna fibra sensible que se haya alterado a causa de mi edad. Hasta donde puedo, trato de mantenerme ecuánime, además por la enorme responsabilidad que tengo como opinante de los asuntos públicos, con una postura crítica. Pero no, creo que no es mi estado de ánimo, creo que es la terrible realidad.
Por el quehacer propio de mi oficio, estoy al tanto de lo que dice todos los días el presidente en sus conferencias, y también el gobernador. Me preocupan –y a eso voy y quiero llegar– las agresiones verbales, prácticamente a diario, de López Obrador contra medios y periodistas. En lugar de aclarar, de precisar, de desmentir con pruebas lo que se publica o dice o se revela en videos, insulta, injuria y amenaza.
No que sea algo nuevo. En el viejo régimen del PRI también se practicó la censura, la amenaza y la represión contra medios, sus empresas y sus trabajadores. El caso más emblemático es el de Excelsior cuando lo dirigía Julio Scherer García, pero mucho antes fue el de la revista Mañana, que dirigía otro gran periodista mexicano, José Pagés Llergo, que dio paso al nacimiento de la revista Siempre!, que fue la escuela en la que abrevé, leyéndola desde adolescente (porque tampoco en mi época había mucho qué leer).
Pero hoy la situación ha llegado al extremo por la irritación que le causa al presidente no solo la crítica sino la verdad, esa que no se puede negar porque está sustentada en imágenes, en audios, en fotografías o en videos. Como opositor fue beneficiario de esa prensa a la que hoy denuesta, que en su momento denunció y criticó también los excesos de los gobiernos priistas y muchas veces salió en su defensa y apoyo.
Organismos defensores de los periodistas, nacionales y extranjeros, han expresado su preocupación porque su púlpito político se convierte en un atalaya desde la que adopta una postura de francotirador, con todo el poder que da el poder político, contra la prensa crítica, pero, más peligroso y preocupante, desde la que con su actitud invita a otros a que la agredan, así como a los periodistas que no se someten y no se convierten en aplaudidores por conveniencia, porque, sabiendo el riesgo que corren, ponen por delante el compromiso con sus lectores, con su audiencia, con sus telerreceptores.
Veracruz, el estado más peligroso para ejercer el periodismo
Al 1 de diciembre del año pasado, el informe anual de Reporteros sin Fronteras calificó 2022 como un año desastroso para la libertad de prensa. Por lo que hace a América Latina, con 11 compañeros muertos, México lideró por cuarto año consecutivo la triste clasificación como el lugar más peligroso para ejercer la profesión.
El organismo dijo que incluso estaba por encima de Ucrania, que está en guerra. De ahí seguían Haití, Siria y Yemen, estos dos últimos también en guerra, esto es, vivimos un escenario de guerra respecto al ejercicio periodístico.
“Los periodistas mexicanos son víctimas del crimen organizado, la inacción del Gobierno de protegerlos y la precariedad de la profesión”, apuntó. No dijo que, triste y lamentablemente, desde el gobierno se alienta la violencia contra medios y periodistas.
Un conteo de la organización Artículo 19 dado a conocer en mayo de 2022 determinó que Veracruz era el estado más peligroso para ejercer el periodismo, y ya antes, la ahora flamante titular de Comunicación Social de la Universidad Veracruzana, Norma Trujillo Báez, había declarado en un coloquio que de acuerdo a cifras de organizaciones internacionales como Reporteros sin Fronteras, desde diciembre de 2011 el estado era considerado el más peligroso a nivel mundial para ejercer el periodismo (Universo, UV, número 652, 19.09.16) (ahora guarda silencio ante la agresión a la prensa).
Cuitláhuac replica a López Obrador
Ayer, para completar el cuadro de preocupación, el gobernador Cuitláhuac García Jiménez cayó en la misma actitud del presidente y en las redes sociales arremetió en forma abierta contra cuatro medios: Oliva Radio, Notiver, Meganoticias y XEU, mencionándolos por su nombre. No que no hubiera habido antes en él asomos de molestia e irritación por los señalamientos, denuncias y críticas por acciones u omisiones de su gobierno, pero se había concretado a hacer reproches a los reporteros que asisten a sus conferencias, incluyendo a mujeres.
Los puso como ejemplo (“creo que me faltaron...”, apuntó), según él, de que “tristemente” secundan a quienes callaron y ahora defienden al exsecretario de Gobierno en la administración de Miguel Ángel Yunes Linares, Rogelio Franco Castán, y a su comentario pegó una imagen con la leyenda: “No hay impunidad para los agresores”, mencionando que el tuxpeño está imputado por un juez por agredir a su pareja, y que fue protegido por el PAN, el PRD y el exfiscal Jorge Winckler.
Ciertamente, Rogelio no es ninguna perita en dulce y, en efecto, está denunciado por una expareja, por agresión. Pero todos fuimos testigos cómo el gobierno cuitlahuista actuó contra él violando la ley y sus derechos humanos, no respetando un amparo que traía, imputándole el delito de ultrajes a la autoridad como pretexto, y vemos ahora cómo no lo saca de la cárcel para que continúe su proceso en libertad no obstante varios amparos que ha ganado en las instancias federales. En un verdadero Estado de Derecho ya hubiera pisado la calle.
Aquí publiqué en su oportunidad que en realidad se trata de un acto de venganza del secretario de Gobierno Eric Cisneros en acuerdo con Rocío Nahle, porque siendo Franco Castán dirigente estatal del PRD le escamoteó a ella, que entonces militaba en ese partido, una candidatura a diputada federal que ya había sido acordada. Desde entonces los dos juraron vengarse si les llegaba la oportunidad de hacerlo, y les llegó. La versión fue confiada por Cisneros a algunos interlocutores a los que en su momento llamó para hacerlos sus aliados.
La prensa solo cumple con su deber profesional
La prensa en general, pues, no solo los medios señalados, ha venido dando cuenta de los amparos resueltos a favor de Rogelio y ha dado espacio también a las voces que han salido en su defensa y de la violación a sus derechos, porque eso está dentro de su quehacer y de su deber profesional hacerlo.
No se trata de un pulso, de un mano a mano de la prensa con o contra el gobierno, sino del cumplimiento de un deber profesional. Es preocupante el señalamiento de ayer, abierto, aunque actos de represión silenciosos lo ha venido habiendo, como el que sufrimos con nuestro portal referente.com.mx, que atacaron cibernéticamente para desaparecerlo, lo que lograron momentáneamente aunque ya estamos resurgiendo, de lo que ni yo ni mis hijos nos quejamos porque sabemos muy bien que el nuestro es oficio de riesgo y que siempre estamos expuestos, pero que siempre, aun si nos desaparecieran físicamente, siempre la razón y la verdad se impondrán y prevalecerán por encima de todo represor.
Toda mi solidaridad con Oliva Noticias, Notiver, Meganoticias y XEU, donde tengo apreciados amigos y compañeros, y, aprovechando, mi abrazo también a mis compañeros de alcalorpolitico.com que este miércoles cumple 18 años bajo la acertada dirección de Joaquín Rosas Garcés, medio que con ese motivo publicó ayer: “No es fácil sostener un medio de comunicación que busca la verdad, que informe con oportunidad, que vive los riesgos de la represión de quienes se sienten lesionados en sus intereses no siempre legítimos...”.
No. No es fácil, pero la prensa profesional va a sobrevivir al actual y a los gobiernos que vengan, como ha sobrevivido a los que pasaron. No se trata de un pulso, digo líneas antes, pero siempre, siempre la prensa se impondrá, y los políticos y los gobernantes, muchos de ellos, más que merecidamente, van a ir a parar al basurero de la historia.
PD. Me gustó la respuesta de Sarah Landa, joven periodista de Meganoticias, quien publicó en su cuenta de Facebook: “Con todo respeto señor gobernador Cuitláhuac García Jiménez creo que lo mal informan.
En #Meganoticias no nos prestamos a este tipo de jueguitos e indirectas sin sustento alguno.
Y coincido, Sí somos voceros pero SOLO de nuestro AUDITORIO.
Nosotros informamos, no alabamos, no vociferamos y mucho menos nos desgarramos las vestiduras por nada ni por nadie.
Le pido respeto nuevamente a nuestro trabajo y medio de comunicación.
#RespetoParaLosPeriodistas”. Mi abrazo a Sarah.