Ruta Cultural
IGNACIO LÓPEZ TARSO ENTRE CINE Y LITERATURA. (I)
“Los albañiles.”
Mtro. José Miguel Naranjo Ramírez.
Cuando investigamos la época de Oro del cine mexicano aparecen figuras artísticas de la talla de Pedro Infante, Jorge Negrete, Joaquín Perdavé, Mario Moreno “Cantinflas”, Arturo de Córdoba, Pedro Armendáris, Carlos Bracho, Sara García, Dolores del Río, María Félix, Libertad Lamarque, Katy Jurado, Misrolava, Elsa Aguirre, y dentro de este amplio repertorio de grandes artistas surge el nombre del primer actor Ignacio López Tarso, quien acaba de cumplir noventa y cinco años de edad, y es una de las figuras vivas más reconocidas del cine mexicano, sin dejar de mencionar que López Tarso ha incursionado en el teatro, en la televisión ya sea mediante telenovelas o series, en general, es un artista completísimo al que hay que homenajear conociendo parte de su larga trayectoria, y el presente mes será dedicado a conocer a Ignacio López Tarso el actor de cine y su relación con el mundo de la literatura.
López Tarso inició su actuación en el séptimo arte desde los primeros años de la década de los cincuenta del siglo XX, ha representado inmortales personajes de destacados literatos, directores y guionistas entre los que se encuentran Juan Rulfo, Carlos Fuentes, Luis Buñuel, Roberto Gavaldón, Emilio Carballido, y un sinfín de nombres egregios en el mundo literario y cineasta, en esta ocasión iniciamos el presente ciclo de cine y literatura en la vida de López Tarso, presentando la novela titulada: “Los albañiles” del escritor y periodista Vicente Leñero, la cual fue llevada a la pantalla grande en el año 1976.
La película fue dirigida por el reconocido cineasta veracruzano Jorge Fons, (ganador del Premio Ariel en tres ocasiones), y el guión fue realizado por el propio Vicente Leñero, Luis Carreón y el Director. Lo primero que quiero puntualizar es que originalmente la obra de Leñero es una novela, aclarado el género literario se puede agregar que es una novela policiaca, detectivesca, pero considero que Vicente Leñero va más allá, con los Albañiles está desnudando las clases sociales, el ambiente, costumbres, idiosincrasia en distintos sectores sociales de la ciudad de México, el deficiente sistema judicial que siempre hemos tenido, toda la historia se desarrolla dentro de la jerga de los grupos sociales que van apareciendo en la historia, así que al momento de leer la obra o ver la película, como buenos albañiles, (sin ofender), se encontrará con mentadas de madres, actitudes vulgares, bajas, explotaciones laborales, abusos, posturas homofóbicas, machistas, elitistas, en verdad una extraordinaria novela que refleja en gran medida muchos complejos y tabúes que de alguna manera se mantienen en nuestra sociedad.
En la historia el personaje central es don Jesús, representado por Ignacio López Tarso. Parte de lo narrado sucede en un edificio en construcción. La trama central será el asesinato de don Jesús, no obstante, el asesinato ocurre cuando la novela va muy avanzada, esto implica que al momento de estar conociendo la historia, Vicente Leñero nos dará muchos hechos que irán aportando al lector elementos para que pueda interpretar y deducir quien fue el asesino de don Jesús.
Al lado de don Jesús estará un joven de 14 a 15 años llamado Isidro, don Jesús es el velador de la obra, representa ser un viejo de 75 años de edad que vive en plena miseria, don Jesús se hace amigo de Isidro y le platicará la historia de su vida. Isidro es un joven muy humilde que trabaja de albañil y pertenece a una familia pobre y desintegrada. Desde un inicio queda claro que don Jesús con muchas mañas y astucia convenció a Isidro para tener relaciones sexuales, se percibe que el viejo sodomiza al joven.
En la obra trabaja como plomero Sergio García, conocido como “el cura” porque estuvo una temporada estudiando en el seminario, pero por diversos motivos no pudo continuar sus estudios, a Sergio le lleva la comida al trabajo su hermana Celerina, esta joven de 14 años de edad se enamoró de Isidro y él de ella, don Jesús le dijo a Isidro que él no tenía inconveniente por si quería enamorar a Celerina, e incluso se ofreció ayudarlo con consejos prácticos (ya los ejercía) y teóricos.
Isidro creía en don Jesús, de hecho las circunstancias de pobreza familiar e incomprensión de su madre, orilló a Isidro a ver en don Jesús la figura de un padre, un guía, alguien que lo estimaba y le daba un espacio adonde dormir. Don Jesús le dijo a Isidro que invitara a Celerina para que el cómo viejo con experiencia mediante sus consejos se la ablandara y pudiera Isidro disfrutar de su amor. El día que Celerina fue a ver a don Jesús, Isidro tuvo que ir a comprarle las medicinas al viejo, cuando regresó Celerina ya no estaba, después se supo que don Jesús la convenció y le enseñó que el sexo es un disfrute y no debía reprimirse, tanto la convenció que fue el perverso de don Jesús el primero en bajarle los calzones a Celerina y disfrutar de su virgen y bello cuerpo.
Hasta lo aquí narrado notoriamente se puede pensar que Sergio García e Isidro tuvieron muchos motivos para asesinar cruelmente como fue asesinado don Jesús, sin embargo, les anticipo que en las investigaciones ministeriales hay muchos más sospechosos, uno de ellos es el Ing. Álvarez, quien era jefe de obra y particularmente amante de la esposa de don Jesús, y conforme avanzan las pesquisas más involucrados aparecerán, al extremo que en momentos se llega a creer que el más sospechoso es Jacinto (otro albañil) o el Nene, (Hijo del millonario Ing. Zamora, constructor de la obra).
Los albañiles es una obra magistral, interesante, intrigante, con un final inesperado, leer la obra y/o ver la película, será un verdadero disfrute y seguramente la mejor manera de ver actuar a uno de los grandes artistas mexicanos como lo es Don Ignacio López Tarso, un personaje que ha tenido toda una vida activa en el cine y en la literatura.
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