Verba brava.
PANTALÓN JUSTICIERO
Por Antonio Trujillo y Perdomo
El norte del estado de Veracruz tendrá un inicio de año con menor violencia y más chido que durante los últimos 12 años del fideduartismo tricolor, por fin con valor, agüacatitos y decisión el goberneytor ojiverde pudo convocar al Ejército Mexicano, a la Armada de México, Policía Federal, PGR, Cisen, Fuerza Civil, Policía estatal de SSP y policías municipales de la región para iniciar el Operativo de Seguridad Tuxpan-Husteca. Ya era tiempo de que el problema incontrolable de la inseguridad en el norte de Veracruz se le enfrentara con “pantalones” y con lo que éstos contienen, aunque no sean de la gallina peñista.
El pretexto de que por el hecho de colindar el norte de Veracruz con el sur de Tamaulipas era suficiente para considerar en el pasado reciente que la zona debía estar a la de a gwiwis contaminada y podrida por la acción nefasta y kuley de los malandros y delincuentes tolerados por los gobiernos priistas de Egidio Torre Cantú y de Javier Duarte, ambos gobernadores priistas, pos tons estábanos fregados; el par de virreyes ojaldras con mole caracterizados no fueron conocidos precisamente por ser de grandes luces o dueños de alta mente de gobernante sino todo lo contrario, aunque el cuerudo Egi se hizo un castillo de 360 millones de pesos, entre otras cosillas y ahorros ji ji ji, también resultó buen roedor del presupuesto, aunque quizá se hizo su chante con las comisiones en dolarucos que le daban sus socios por derecho de paso, de vía, de viada de la merca en la entidad norteña.
El sur de Tamaulipas y el norte de Veracruz tienen una actividad delictiva megafrenética y común, antes de Egi Torre, fueron los mandatarios tamaulipecos Manuel Cavazos, Tomás Yarrington y Eugenio Hernández, qué pokar de malandros priistas, quienes sabrosamente permitieron a los delincuentes hacer de todo y sin medida, y no fue de a grapas.
Antes del inicio sexenal del tamaulipeco Torre Cantú el 1 de Enero de 2011, (toma de posesión a la que por cierto acudió Javier Duarte en calidad de nuevo gobernador veracruzano, antes de tomar su nombre de delincuente Alex del Hoyo), a principios de Octubre de 2010, y a pedimento del bigotudo Egi, la Secretaría de la Defensa Nacional teniendo de titular al General de División DEM. Guillermo Galván Galván, designó al General de Brigada DEM. Ubaldo Ayala Tinoco, Oficial de Inteligencia graduado en el Pentágono EUA, uno de los poquísimos militares mexicanos con tal característica, para hacerse cargo de la Secretaría de Seguridad Pública Estatal a partir del 1 de Enero de 2011, como ocurrió arribando con un grupo inicial de apoyo conformado por civiles y militares aproximadamente 30 elementos.
Sin embargo la “fuerza, el poder e influencia” y dominio que ejercía el Secretario de Gobierno, Morelos Canseco Gómez no permitió y bloqueó todo para que el General no obtuviera recursos, control de personal, vehículos, confianza. La SSP y el Gobierno estatal eran una “podredumbre” dominada por la delincuencia organizada, como lo constató en su informe de renuncia el general Ubaldo; a tres meses de haber tomado posesión de la SSP, rematando su escrito con un “..Tamaulipas es un pinche cochinero..” Me consta.
Inclusive se descubrió un complot para asesinar a los integrantes del equipo de trabajo de Ayala Tinoco, complot fraguado en la misma SSP tamaulipeca. El grupo delincuencial Los Z, tenía bajo contrato y amenaza a policías estatales que laboraban 24 por 48; 24 horas de policías y 48 horas de halcones quienes junto con otros formaban un grupo de informantes en número de seis mil, 3 mil halconeaban de día y otro tanto de noche.
Morelos Canseco Gómez fue Secretario de Gobierno hasta Julio de 2012, luego pasó a la Secretaría de Trabajo y en Agosto de 2013 fue dado de baja. Todo ese tiempo fue considerado por la sociedad tamaulipeca el “enlace” del grupo de los Z con el gobierno del ahora ex gober Torre Cantú, un blandengue, pelele y corrupto priista.
Un detalle notable era observar que a excepción del gobernador, ningún funcionario de gobierno tenía escolta, ¡los cuidaban los mañosos!¡poquísima madre de jijoepotas!
Quizá por ello, por conocer el lenguaje entre autoridades de gobierno con delincuencia organizada es que a mí no me extrañó la declaración de don Miyu en el norte de Veracruz, “Aquí había protección a organizaciones delictivas era sabido por todos en Tuxpan que Francisco Colorado Cessa encabezaba una célula de delincuencia organizada y que tenía una relación cercana con Duarte, con Alberto Silva, con Fidel Herrera –¿no le faltó Fredy Gárgara?- y que ellos protegían a la actividad delictiva. ¡Se acabó!”.
Lo que no deja de ser cierto es que la delincuencia tolerada en Veracruz venturosamente tendrá fin, eso espera la sociedad que confió en Miyuli, sin embargo tendrá que irse con tiento ya que la herencia maldita de las cadenas del mal cobijadas en la docena ratatiú, probablemente estén enquistadas en miembros de instituciones policiacas hasta la médula y en el rinconcito donde hace remolino el cuerpo, neta del planeta.
Y tal como lo expresó mi general Ubaldo, que Tamaulipas era un pinche cochinero, Veracruz no puede estar muy alejado de lo mismo pero; “¡se acabó!”.
Ha dicho el justiciero choleño; “no hay complacencia, no habrá complacencia en Veracruz para la actividad delictiva”, digo yo, ¿y el gobernador tamaulipeco panista Francisco García Cabeza de Vaca, dice lo mismo?
GUIJARRO: ¿Dónde están las embarcaciones del Grupo Naútico de la SSP? ¡Sépalo Tellez!