Verba brava

MUYULI SE BAÑÓ

Por Antonio Trujillo y Perdomo

Parte importantísima de la actividad de un político actuante es la popularidad que pudiera tener en determinadas circunstancias o en precisos momentos de servidor público .

Si don Miyuli pretendió el Viernes reciente medirle el agua a los camotes para indagar en vivo y a todo color  en qué rayita se encuentra su aplausómetro, pues el bato la hizo chillar netamente, como decía el difunto Juanga, el de las lentejuelas y chaquiras nacas (Alvarado dixit); lo que se ve, no se juzga.

El cimbrador choleño había ido a darles la luz a un wato de gente que le andan fallando las lámparas, fue a iniciar oficialmente el programa Como veo  doy, no cierto, se nombra “Ver por ti” en el antiquísimo Hospital Luis F. Nachón, “El Civil” como es conocido en Jalapita. Hospital pa´la jodidez de la capital veracruzana, pero no por ello con calidad de personal médico y apoyo.

En ese hospital existe un área de Distinción que la utilizan quienes tienen baro para cuidar su salud y porque existen médicos de muy alta calidad, reconocidos internacionalmente, esa área fue alquilada por el ISSSTE para dar servicio a pacientes burócratas mientras se hacían reparaciones o construcciones en la institución médica de presupuesto federal.

Pues bien, don Miyu y el doc Iram Suárez Villa, Secre SS  le llegaron al micro auditorio donde oidores y veedores fueron constataron el testimonio de una paciente Vianey Meléndez que el Jueves no había podido ver (sólo oir)  uno de los capítulos de La Candidata y que para ese día Viernes se iba a chutar hasta a la Denís Market, pero viéndo directo a “la ojitos” pues ya la habían operado y ya tenía vista estilo Superchica y sus sobrinos incrédulos le preguntaban ¿ves tía?. Ella les respondió que con una cirugía breve y técnica nueva, de volada le pusieron oclayos  igual que lo harán con 4 mil 999 que tienen poca luz debido a tanta neblina causada por las cataratas. Que esas operaciones las efectuarán los médicos que chambean con Iram en el transcurso de dos años.

El goberneytor de los labios con botox dijo que en realidad él quiere que no sean solo 5 mil quienes recuperen la capacidad de visión sino unos 50 mil, pero depende de que haya billetes y de que sea suficiente el tiempo de dosaños de gobierno. Pa´mí que si lo cumple pero sólo que sea Chikiyunes el próximo gober panperredista, o sea en 8 años sí lo logran.   

“Ver por ti” ayuda a restaurar la visión a pacientes que tienen cataratas tamaño Niágara e Iguazú, de esas chonchas y carnudas tipo costeña.

Pa´que no tengan miedo y agarren confianza quienes serán operados  contó a micrófono abierto que cuando a él  le empezó a fallar la vista al bucear en el Arrecife de Roatan (en donde nació el plátano) buscando a Nemo;  cuando se tropezaba con otros atletas al correr el maratón de Niu Yor, cuando no distinguía el color de ojos de sus nietos y no podía ler ni la Verba porque veía puras letras borrascosas, decidió que lo operaran y como las farmacias, santo remedio. Ora ve hasta el futuro.

Al “Civil” le prometió que le va a meter una lanota pa´que se aliviane el nosocomio que es de los vejestorios de la capital, emblemático porque parientes de enfermos pobres–en espera de la evolución de los encamados-  duermen en la calle y se les enfría el lomo y la paleta porque lo hacen sobre cemento o la banqueta.

En ese hospital sería bueno que contrataran personal especializado para recibir y permitir el ingreso a los parientes de enfermos ya que los que permiten o niegan el acceso son policías de IPAX  quienes no tienen por qué desarrollar esa actividad, en realidad es una irresponsabilidad delegada por directivos de Clínicas y Hopitales a estos policías preventivos.

Los vigilantes de IPAX están para hacer presencia y actuar en casos de problemas de personas violentas o que pretendan introducir  objetos u otras cosas prohibidas en el protocolo médico, ¡coño joder! pero no están para registrar las bolsas o las naylon de damas que además tienen la pena de estar cuidando  un enfermo. No hay que ser, pa´que no les digan.

No son quién para dar recomendaciones, tan solo sugiero que Irám  Suárez Villa titular de Secretaría de Salud y Mario Marín Zamora gerente de la empresa del IPAX, dispongan unos minutos para analizar esta situación que degrada a los policías y libera de una responsabilidad a los titulares de los nosocomios.        

Lo que no deja de ser cierto es que luego de la visita de Miyu al Civil, se echó dos cuadras a pincel hasta palacio de Gobierno donde tenía una reunión de las 46 que se tira al día, sin embargo tardó más de una hora en recorrer 200 metros de banqueta pues los 23 mil 785 selfies que se tomó y los 18 mi 993 bechos y abachos que regaló a sus fans no le permitía avanzar a zancadas como acostumbra para eludir a los pedinches de chamba, chayos y favores.

El aplausómetro del panperredista Yunes –el botines cinturonero  un tal Luisito Rey Obregón intenta ofenderlo  cuando lo moteja de “changuito expriista” que hace yunieshow-  decía yo que el aplausómetro se le botó pa´rribotota pues no daba paso con guaracho,  traiba cacles de Naulingo, sin que alguien le saludara o le diera un recargón pidiéndole de todo y el respondía, no hay, no hay, no hay.

Ojeó libros de hojas en el Pasaje Enríquez, saludó a la mesa de insignes del club de “Pájaros caídos” en el Bola de Oro, se echó un zapateado con estudiantes de música que entonaban La Bamba junto a La Lotería, y en Casa Olivier la maremágnum de fans estaba incontenible. Tuvo que pedalearle para llegar a su cita en Palacio. 

El baño de pueblo había quedado atrás, subió raudo escalinatas vetustas de piedra negra y se perdió tras el olor de la puerta de madera recién barnizada de su despacho, ya la hice, consintió para sus adentros. 

GUIJARRO: Saludos afectuosos a la PGR. Gracias por las atenciones brindadas. A sus instrucciones estoy. Pa´pronto.