Verba brava
ESCALADA DE SIEMBRAS
Por Antonio Trujillo y Perdomo
Sería grave con consecuencia impredecible el que se confirmara la versión publicada y firmada por el director del portal alcalorpolitico.com, Joaquín Rosas, en el sentido de que algún reportero de su plantilla de personal haya recibido el pitazo, el chisme, la información o el dato preciso de que amagan con “sembrar” armas y drogas a reporteros policiacos de la zona conurbada VeraBoca para incriminarlos con delincuentes de la región.
El director de ese medio, inaugurado en el sexenio de Fidel Herrera y apadrinado por la mismísima Nauyaca dando el clik de arranque de operaciones, el director literalmente mete las manoplas a la lumbre por la honorabilidad de su personal, chido guan, brodi.
Excelente posición de un patrón respecto a la honorabilidad de sus chalanes y chamberos, así debiera ser siempre, salir con el pecho de acero al descubierto y ponerse de escudo para defender a su equipo de trabajo. Bien hecho, neta que simondor.
Sin embargo y dicho con el debido respeto, la nota informativa es ambigua y carece de nombres tanto como de fuente, el cuerpo de la misma no tiene consistencia informativa. ¿Por qué no da el nombre de “un alto mando de los cuerpos de Seguridad estatal” quien según el director, diera la orden de “sembrar” armas y drogas a reporteros policiacos. ¿Es fuente confiable o un chismoso de lo que abundan? Clarines que la ética periodística no le permitiría al autor de la nota revelar su fuente.
¿Y si la fuente agarró de maje al director y le mintió, y posteriormente una investigación auténtica incriminara a ese reportero?, es suposición mía.
O, ¿qué tal si la fuente es el conducto de los malandros para hacer llegar el recado y escalar las notas de desprestigio contra altos mandos de seguridad estatal?
“Tres reporteros policiacos de la zona conurbada Veracruz Boca del Rio, fueron advertidos la noche de este jueves 13 de julio” dice alcalor.
“Fueron advertidos”, probablemente esos advertidores sean personas cercanas a un “alto mando” de Seguridad como pudieran ser escoltas corridos, ujieres, secretarias defenestradas, jefecillos aviadores, edecarnes que les mocharon la compensación, y tuvieron la deslealtad boquifloja de ir con chisme inventado acalambrando a los tres reporteros en comento. Obvio que en caso de ser cierta tal aseveración de haberse dado esa “orden”.
Altos mandos en cuerpos de Seguridad (Pública del Edo) son el Secretario, Jaime Téllez Marié; el Subsecretario de Operaciones, Narciso Peña Cortés; el Subsecretario de Logística, Antonio Garza García; el Director de la Fuerza Civil, Carlos García Cruz y Juan Carlos Saldaña Morán, Jefe de la Unidad Administrativa. ¿Acaso alguno de ellos tuvo la descocada idea de “cargar” a unos indefensos reporteros de notas policiacas para perjudicarlos de por vida? Es una duda razonable, en buen castilla; pero que se cae por infantil y hueca.
Temible que algún “alto mando” se le hubiera ocurrido semejante barbaridad con la “intención de desencadenar un ataque contra el personal de alcalorpolitico.com” ¡coño, joder, merrecagoenlasopa!
En la época posterior a la Revolución un reportero “inventó” una nota periodística narrando el vuelo de una aeronave, describiendo paisajes aéreos, situaciones del vuelo, clima, sensaciones, etc. Después se sabría que ese vuelo nunca se efectuó, desde entonces a una nota inventada se le denomina que es “una volada”, es decir puro chisme para victimizarse o para jalar atención. No digo que el psicólogo-periodista Joaquín haya inventado la nota…
Supongo que lo que procede es que los reporteros “advertidos” deberán acudir a las autoridades investigadoras estatales, federales, internacionales, de la Haya, del Infinito y más allá y declaren citando a quien les “advirtió” de las tenebras de un alto mando de seguridad estatal, para que se aclare el asunto y se actúe en consecuencia.
Aunque chance y se cite a reunión urgente del Grupo Veracruz de seguridad para dilucidar entre soldados, marinos, gendarmes, polis federales, caballería, boys scouts, milicias, ipaxes,grupos de contención, grupos de autodefensa de colonias, orejas y polis infiltrados con malandros para ver quien chingaos cometió la estupidez de soltar la sopa de que pretendían “cargar” a unos batos que ni la deben, ¡por favor!
Ya parece que en el supuesto de practicarse la antiquísima “cargada” contra indefensos reporteros, esto se anduviera comentando por los pasillos, qué, ¿nomamenítumamá?
Escalada de linchamiento, ¡mécox! . Al que le quede el saco, que se lo ponga, y al que no, pos no, que le corte las mangas y haga un chaleco juar juar juar.
¿Y los patrones (de sus medios) de los otros dos reporteros creyeron el chisme que les llevaron y saltarán en defensa? Cosas veremos.