A pesar de tener un aumento considerable en su presupuesto, el Órgano de Fiscalización Superior del Estado (Orfis) no cumplió con su obligación al ser cómplice del desastre financiero en el estado de Veracruz, en tanto su titular Lorenzo Antonio Portilla Vázquez es tan responsable como el propio Gobernador.

La complicidad va más allá, dado que la propia Fiscalía General del Estado (FGE) desechó diversas denuncias interpuestas por el desvió millonario de recursos, lamentó el diputado local panista Julen Rementería del Puerto.

Calificó como imposible el que el órgano y brazo derecho del Congreso no advirtiera las retenciones de 2 mil 500 mdp  realizadas por la SEFIPLAN sobre Productos del Trabajo, que no se enteran al Fisco.

El Orfis tampoco informó la retención del ISR descontado a la UV y las cuotas de Seguridad Social a maestros de la SEV y que no se enteraron al IMSS, así como las retenciones por créditos de vivienda del Fovissste y por la contratación de créditos personales amortizados vía nómina con la empresa Intermercado, Banorte y Metlife.

Explicó que el organismo no se percató de esas, ni de todas las irregularidades financieras que se registraban año con año en las cuentas públicas del Estado, aunado a la ineptitud de seis titulares de la Secretaría de Finanzas y Planeación (Sefiplan), quienes gastaron más de lo presupuestado.

Rementería del Puerto exigió a la mayoría de la LXIII Legislatura dejar de proteger a los secretarios de despacho, y proceder a la denuncia por causarle daño al erario así como a los propios trabajadores del Estado.

Para saber dónde quedó el dinero de Veracruz, Rementería del Puerto señaló: “se debe obligar a los titulares del Orfis y Sefiplan a dar la cara y explicar cómo se llegó a tanta ignominia, descredito, fraude, violación de derechos y menoscabo a los veracruzanos”.

El integrante de la Comisión Permanente de la Comisión de Vigilancia recordó que de 2011 al 2016, el presupuesto del Órgano de Fiscalización ha aumentado 20 mdp, no obstante a pesar de ello no cumplió su encomienda. “El ORFIS no sirve para nada, ni siquiera para dar la cara”, remató el legislador.