Yhadira Paredes/Xalapa, Ver.- Es necesario estar más atento al rostro de los más pobres y ser menos cómplice de quienes los olvidan, manipulan o marginan, pidió la Arquidiócesis de Xalapa en su comunicado de este domingo, donde exhortó también a la población a participar en el proceso electoral del próximo 1 de julio.
En el comunicado del vocero de la Arquidiócesis, Juan Manuel Suazo Reyes, considera que se debe trabajar comprometidamente por un México próspero y pacífico, solidario y participativo.
Recordó que el pasado 19 de marzo la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) emitió un comunicado donde se destaca la importancia de la participación en la vida cívica y política de las comunidades.
Es una obligación ciudadana y cristiana, con miras a lograr la transformación que tanto se necesita, no tan solo hoy por los devastadores acontecimientos que presenciamos, sino históricamente, ya que es muy grande la deuda social que tenemos como nación con los más pobres y excluidos.
Asimismo, destacó que se pidió a los fines la emisión de un voto responsable, para que en total libertad "elijan en conciencia de acuerdo a los principios y valores que han descubierto en la experiencia de la fe".
Suazo Reyes, manifestó que de acuerdo al comunicado de la Conferencia Episcopado se proponen cinco exhortaciones para hacer "un discernimiento crítico que nos permita optar en conciencia por quienes (gobernantes y legisladores) puedan realizar en lo posible el auténtico bien común".
Y desglosó: participar civicamente en la conciencia de que la emisión del sufragio entraña una doble característica para todos los ciudadanos (derecho – obligación), el llamado es para que nadie se quede sin participar, además se debe conocer a los candidatos y sus propuestas, discernir, salir a votar, y dar seguimiento al modo como se ofrece el servicio público.
En el segundo punto, llama a orar en familia y comunidad para que desde la fe, todos podamos mostrar nuestro compromiso con el México que sufre; elegir a las personas de manera prudente y responsable para cada puesto de elección popular a la persona más idónea; y, finalmente, vigilar la actuación de los políticos y su desempeño en la implementación de las políticas públicas.