Yhadira Paredes/Xalapa, Ver.- Tras asegurar que no hablará de “tonterías” al referirse a las presuntas denuncias en su contra ante Procuraduría General de la República, el gobernador Miguel Ángel Yunes Linares reconoció que al final de su bienio, uno de los problemas más importantes que faltan por resolver es la pobreza, pues en Veracruz, el 62 por ciento de su población se encuentra en esta condición.
Sin embargo, dijo, el que más llama la atención de la ciudadanía es la seguridad, en cual hay que hacer mayor esfuerzo, como se hizo en este bienio con el concurso del Gobierno Federal, gobierno estatal, fuerzas armadas.
“Lo hicimos en un esquema muy similar como el que está proponiendo hoy el presidente electo, un esquema de participación de fuerzas armadas, civiles, estatales y municipales, con una situación de emergencia, hay que hacer un esfuerzo mayor”.
Asimismo, sostuvo que se entrega un Veracruz con estabilidad política, sin problemas sociales graves, con una situación financiera distinta a la que se vivía hace dos años, con avances en materia de infraestructura.
Sobre si le queda a deber algo a los veracruzanos, consideró que es una pregunta difícil, pues hubiera querido tener el tiempo suficiente para gobernar, pues los seis años normales de un periodo constitucional están calculados para poder llevar a cabo proyectos de larga visión.
Cuestionado en torno a si teme una cacería de brujas en su contra por parte de las nuevas autoridades estatales y federales respondió “yo no soy bruja, ¿vengarse de qué?, yo solo lo que hice fue cumplir a los veracruzanos que demandaban justicia, actuamos contra quienes se tenía que actuar, era grave la situación, se actuó y cumplimos”.
Destacó que si se le pregunta a los veracruzanos que opinan de esta situación estarían de acuerdo , toda vez que no solo se hizo justicia, también se recuperaron mil 200 millones de pesos, que si bien es poco en comparación de lo que se robaron en la anterior la administración se hizo un gran esfuerzo.