BERLÍN.- Un niño de 12 años, de nacionalidad germano-iraquí fue detenido por intentar cometer un atentado explosivo en un bazar de Navidad de la occidental ciudad de Ludwigshafen, informó hoy la Fiscalía Federal alemana.
El menor, quien desde el pasado verano pensaba viajar a Siria para unirse al grupo extremista Estado Islámico (EI), fue detenido el 5 de diciembre pasado, cuando se desplazó al bazar navideño del centro de la ciudad y abandonó una mochila llena de explosivos de fabricación casera.
De acuerdo con fuentes de seguridad, el niño fue “fuertemente radicalizado” a través de Internet e "instigado" por un miembro desconocido del grupo terrorista radical que opera en Siria e Irak, reveló el semanario alemán "Focus".
La investigación apunta a que el explosivo no estalló a causa de una falla en el detonador y a que, gracias a un transeúnte que alertó sobre el paquete sospechoso, la policía pudo llegar al lugar de los hechos y controlar la situación”, indicó un portavoz de la Fiscalía Federal en Karlsruhe.
Además, el menor también habría colocado un frasco de vidrio lleno de clavos para que actuasen como metralla en el momento de la explosión, destacó la fuente, sin dar detalles sobre la identidad del “pequeño terrorista”.
Con el objetivo de no entorpecer la investigación, no podemos dar más datos", señaló un portavoz del Ministerio Público.
Las autoridades alemanas tratan ahora de determinar el trasfondo del presunto ataque y la peligrosidad que podrían entrañar los materiales utilizados en la fabricación del explosivo.
Sobre el menor que habría planeado la detonación, “Focus” destacó que lo único que se sabe es que se trata de un niño nacido en 2004 en Ludwigshafen y que tendría doble nacionalidad alemana-iraquí y que habría sido "fuertemente radicalizado en el ámbito religioso".
Una persona que se encontraba en el mercado navideño llamó a la Policía tras encontrar la mochila.
Asimismo, la publicación destacó que el menor habría intentado cometer el ataque el pasado 26 de noviembre en el mercado navideño de Ludwigshafen, antes de dejar su “mochila explosiva”, en el bazar navideño, ubicado cerca del ayuntamiento de la ciudad.
El menor, con la autorización de sus padres, ha sido entregado a los servicios sociales, según las autoridades de Ludwigshafen y en cuanto a su imputabilidad, según portavoz del Ministerio de Justicia "eso no significa que no se lo pueda culpar ni que no habrá sanciones".