Amelia Gutiérrez Solís/ Agencia Informativa Conacyt/Colima, Colima.- El doctor en ingeniería mecánica por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Jorge Armando Ojeda Sánchez, exbecario del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), desde edad temprana se sintió atraído por las matemáticas y posteriormente por la ciencia.
“Principalmente ese interés surgió por la ciencia ficción porque me interesaba conocer qué pasaba con ciertos desarrollos relacionados con la física, por eso decidí estudiar ingeniería mecánica”, explicó el experto en termofluidos durante la entrevista con la Agencia Informativa Conacyt.
El investigador, originario de la Ciudad de México, era asiduo a los días de puertas abiertas, en los que recorría los diferentes institutos de investigación de la UNAM, en donde se presentaban los investigadores y sus proyectos.
“En esa época de estudiante de licenciatura, asistí a muchas ponencias sobre agujeros negros, atmósferas primitivas, supercómputo y visualización, entre otros temas, que me fueron atrayendo a la ciencia, sobre todo a la teoría, que permite explorar distintos escenarios de un fenómeno físico”, explicó el profesor investigador de la Facultad de Arquitectura y Diseño (Fayd), de la Universidad de Colima (Ucol).
El miembro investigador de la Red de Energía Solar, del Conacyt, señaló que una de las principales motivaciones al inicio de su trayectoria fueron las ciencias de la ingeniería para entender los flujos y posteriormente se dedicó a investigar temas de energías renovables por medio de la teoría constructal, la cual señala que las formas o estructuras en la naturaleza permiten al organismo vivo persistir en el tiempo, como por ejemplo el cuerpo humano con la red del torrente sanguíneo.
Energía solar térmica
“En este tipo de investigaciones el propósito es llevar estos modelos naturales a la ingeniería para optimizar su funcionamiento y de ahí surgió la idea de un colector solar, inicialmente en la Universidad Autónoma de Nayarit (UAN), con un proyecto apoyado por el Conacyt”, resaltó el miembro de la International Solar Energy Society (ISES).
Durante 2014, el doctor en ingeniería mecánica colaboró en el proyecto Repatriación-Retención del Conacyt y la UAN, denominado "Desarrollo de dispositivos de colección solar como una alternativa para el aprovechamiento de la energía solar térmica, aplicando la teoría constructal".
Jorge Armando Ojeda Sánchez
Estudió ingeniería mecánica en la Facultad de Ingeniería de la UNAM; la maestría en ciencia e ingeniería de materiales en el Instituto de Investigaciones en Materiales (IIM) de la UNAM; y el doctorado en ingeniería mecánica en esta misma institución de educación superior. Actualmente se desempeña como profesor investigador de la Facultad de Arquitectura y Diseño de la Ucol. Además es miembro investigador de la Red de Energía Solar, del Conacyt y de la International Solar Energy Society.
En 2015, Ojeda Sánchez se incorporó a la Ucol en el grupo de arquitectura bioclimática de la Fayd, en el análisis térmico de edificios, simulación numérica y análisis de consumo de energía, así como en el desarrollo de energías renovables y análisis del consumo de energía.
Sus principales líneas de investigación son la transferencia de calor, los materiales y la aplicación de la teoría constructal.
“Es muy importante conocer las bondades de los materiales porque a veces está sobredimensionado un material de construcción, por ejemplo, y nada más nos preocupa que resista, que no es menos importante, pero este material está interactuando con el medio ambiente, por ello es indispensable conocer las propiedades térmicas como la densidad, conductividad y calor específico para saberlo aprovechar”, detalló Ojeda Sánchez durante la entrevista en el laboratorio de arquitectura.
Asegura que en la arquitectura lo mejor es utilizar los materiales locales, lo que es un conocimiento empírico, por ello probar los nuevos materiales en combinaciones con otros reciclables o actuales potencializa su uso para brindar mayor comodidad al usuario o al habitante de los edificios, lo que es una rama de la arquitectura bioclimática.
Jorge Armando Ojeda expresó que disfruta realizar investigaciones y, a la vez, compartir sus conocimientos con los estudiantes.
“La docencia y la investigación no se pueden separar, van ligados y se complementan. Yo disfruto ambas actividades. En la investigación busco ese otro conocimiento que pueda ser aplicable o que brinde mejores resultados o un mejor escenario en una situación”, expuso.
El investigador ha sido docente en la UNAM, en el Instituto Tecnológico de Querétaro (ITQ), en el Instituto Tecnológico de San Juan del Río (Itsanjuan) —estos dos pertenecientes al Tecnológico Nacional de México (Tecnm)— y en la UAN.
Entre sus investigaciones están Modelado de un flujo pulsado en un tubo de paredes elásticas con un fluido no-newtoniano; Teoría constructal aplicada a un sistema capilar sanguíneo y Teoría constructal aplicada a un colector solar, por mencionar algunas.
Además ha impartido ponencias sobre diversos temas como: Aplicación de software de simulación para análisis térmico. Caracterización térmica de materiales; Obtención de un aislante térmico generado por materiales reciclados para un clima cálido subhúmedo; Evaluación analítica y experimental de un colector termosolar con un nanofluido de agua y nanotubos de carbón; Simulación climática en edificios con Design Builder; Exploración del comportamiento de la distribución constructal desde la perspectiva de la ventilación natural de vanos arquitectónicos en vivienda de interés social; y Aplicación de un nanofluido en un colector solar constructal, entre otros.
Actualmente trabaja en un modelo teórico para el diseño de la red de contactos metálicos en una celda fotovoltaica para que se cubra un área más amplia y una mayor conexión de electricidad generada con el menor material posible, basándose en la teoría constructal que se enfoca en la optimización de los flujos.
“La finalidad es crear celdas fotovoltaicas y que los electrodos puedan imprimirse sobre una celda para que sea más económico y accesible, que buscar las tiras de aleaciones de metal o de plata, lo que eleva el costo”, afirmó Ojeda Sánchez.
Asimismo, trabaja en un intercambiador de calor, pero a niveles muy pequeños, que tenga microcanales con nanofluidos.
Señaló que en las investigaciones orientadas al área de ingeniería y arquitectura prevalece el modelado matemático. En los materiales, el modelado macroscópico permite determinar ciertos parámetros de diseño y en arquitectura emplea simulaciones numéricas para el análisis de materiales.
Sus planes a corto plazo son seguir publicando resultados de sus proyectos científicos y seguir aprendiendo e investigando.