Alejandro Ávila/Veracruz, Ver.- Sin orden de aprehensión o cateo, presuntos elementos de la Policía Estatal se llevaron a una familia en el fraccionamiento Valle Alto del municipio de Veracruz.

Testigos aseguran que presuntos elementos de la Policía Estatal y Policía Vial irrumpieron con violencia en tres domicilios del mencionado fraccionamiento, específicamente sobre la calle Cigüeña entre Martín Pescador y Paloma.

Los vecinos mencionan que, las patrullas portaban los colores oficiales de la SSP, pero tenían cubiertos los números económicos de las unidades, probablemente para evitar que fueran identificados mediante fotografías o videos.

Las viviendas que fueron allanadas son las marcadas con los números 54, 61 y 62, donde fueron detenidos dos adultos mayores y dos menores de edad.

Los testigos y denunciantes aseguran que, más de 30 elementos realizaron el operativo donde ingresaron a la fuerza a los hogares, y acusan destruyeron todo a su paso;  incluso, en algunos casas habrían robado pertenencias, pues también sacaron bolsas de las viviendas.

Del domicilio marcado con el número 54 se llevaron por la fuerza a un señor de nombre Fabián "N" de 54 años de edad y ocupacion velador, así como a su esposa identificada como Teresa "N" de 42.

Mientras tanto de la vivienda que tenía el número 61, privaron de su libertad a la joven Marina "N" de 15 años y a su hermano Gabriel "N" de 17, entre los reclamos de los vecinos que exigían los dejaran en paz.

Los colonos que presenciaron esto, dieron a conocer que los agentes no tardaron ni 10 minutos en realizar la violenta operación, además de qué negaron cualquier tipo de explicación y aparentemente no presentaron órdenes de aprehensión o cateo.

Esta no es la primera situación de abuso de autoridad que se denuncia, pues cabe recordar que el pasado 20 de mayo, en un operativo similar ocurrido durante la madrugada en la calle Carlos Cruz entre Cuauhtémoc y Victoria, se llevaron a otro joven por la fuerza junto con su vehículo.

En aquella ocasión, los policías vestidos de civiles dispararon en múltiples ocasiones contra la fachada, el portón y en el interior de la vivienda para amedrentar a los padres del muchacho, quienes son ya personas de la tercera edad.