Veracruz, Ver.- El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Veracruz Norte, llama a la población a cuidar los hábitos alimenticios y realizar actividades físicas para reducir el sedentarismo generado por la actual emergencia sanitaria por COVID-19 con el objetivo de evitar daños hepáticos en el organismo.
El hígado graso se debe al acúmulo de ciertas grasas, triglicéridos, en los hepatocitos, que son células propias del hígado, comentó el médico gastroenterólogo del Hospital General de Zona (HGZ) No. 11, del IMSS en la entidad, Rafael Aguirre Cardoza.
Explicó que las complicaciones más graves del hígado graso van desde trastornos metabólicos, insuficiencia hepática, fibrosis y cirrosis hepática; el hígado graso suele aparecer a causa de la toma de grandes medidas de alcohol, azúcares o grasas; además por el sobrepeso, la obesidad, consumo excesivo de harinas, grasas y azúcares.
Los factores de riesgo del hígado graso pueden tener distintos orígenes, como son la falta de riego sanguíneo, isquemia, acúmulo de sangre o congestión, daño tóxico como el alcohol; si estos procesos se acompañan de hepatitis se produce una necrosis que desembocará en fibrosis hepática.
Mencionó que el principal tratamiento para este padecimiento comienza en ser atendido lo antes posible por un médico; aquellas personas que están en etapas más avanzadas de la enfermedad (inflamación o fibrosis hepática importante), pueden tratarse con algunos medicamentos, como antioxidantes (vitamina E) o agentes sensibilizadores de la insulina.
Finalmente, el especialista recomendó que la mejor prevención es llevar una vida escrupulosa, realizar ejercicio cuando menos 30 minutos diarios durante 5 días, llevar una alimentación balanceada, evitar el sobrepeso y la obesidad, así como evitar o disminuir el consumo de alcohol y tabaco.