CIUDAD DE MÉXICO.- El gobernador del Banco de México, Agustín Carstens, informó que la institución a su cargo recortó la proyección de crecimiento de la economía mexicana para este año a un rango entre 1.3 a 2.3 por ciento, mientras que hace tres meses se esperaba entre 1.5 a 2.5 por ciento.
“Tomando en cuenta la información más reciente y la incertidumbre que se ha creado alrededor del desempeño de la economía mexicana, además de la incertidumbre sobre la relación bilateral y las finanzas públicas sanas, la junta consideró oportuno revisar a la baja los pronósticos de crecimiento para el país para el año en curso”, explicó.
En la presentación del Informe Trimestral de octubre-diciembre de 2016, añadió que para 2018 bajó la proyección del PIB a un intervalo entre 1.7 a 2.7 por ciento, desde 2.2 a 3.2 por ciento.
Entre los riesgos a la baja para el crecimiento mencionó que ante la incertidumbre por el TLCAN y algunas medidas fiscales en EU, algunas empresas cancelen o pospongan planes de inversión o que las calificadoras degraden el riesgo crediticio de México; otro peligro es que se aplique una política comercial y fiscal más proteccionista en EU.
DESCARTA CRÉDITO
Carstens descartó que Banxico esté buscando una línea de crédito swap con la Fed.
Reconoció que el lunes estuvo en Washington con Janet Yellen, presidenta de la Reserva Federal, “como parte de las conversaciones periódicas que tenemos con ella, evaluando la situación internacional y respondiéndole preguntas sobre las acciones que ha emprendido Banxico.
“Nos sentimos satisfechos con los recursos que tenemos a nuestra disposición, las reservas internacionales se han mantenido en niveles altos, entre 175 y 176 mil millones de dólares, y por otro lado tenemos la línea de crédito flexible con el FMI, por alrededor de 86 mil millones”.
“Estamos por arriba de las reservas óptimas, tomando diferentes mediciones como la deuda pública, la tenencia de extranjeros en títulos del gobierno en pesos, el endeudamiento corporativo y las importaciones”, precisó.
Sobre la inflación, Agustín Carstens estimó que terminará el año por encima del límite máximo superior de la meta de la autoridad monetaria y que al finalizar 2018 estará cerca de tres por ciento.
Entre los riesgos a la baja de la inflación, el gobernador de Banxico mencionó que el tipo de cambio continúe apreciándose, “el cual ha sobre reaccionado a los eventos en la economía y se encuentra muy depreciado”.
Fuente: Excelsior